Las palabras son las gafas o ruedas del cerebro

He querido empezar el último diario antes de unos necesarios días de vacaciones con esta reflexión de Emili Teixidor, para rendirle homenaje en su muerte, y también porque su reflexión es muy apropiada en estos momentos. En muchos periódicos anteriores he hecho referencia, no se dicen las cosas con las palabras que corresponden, y en consecuencia, no hacemos las cosas que tocan. ¡Mal!

¡Y qué mes de junio! Desde las sesiones de Sitges en el encuentro del Círculo de Economía, todo era llorar… (salvaría, por su nivel, el interesante debate entre el exministro francés Kouchner y el exministro alemán Fisher): las tensiones de la prima de riesgo, el paro incontrolado, Grecia, el “rescate” de España, las sentencias que afectan a Cataluña, y sobre todo los problemas que ocurren todos los ciudadanos. ¿No pueden ocurrir más cosas negativas?

Pero, como sabe, siempre queremos ser positivos, y en medio de la caída económica general, en medio del desánimo imperante, encontramos algunas notas positivas:

• Es positivo haber logrado marcar un precio en el mercado inmobiliario de Sant Cugat, después de años de bajar los precios cada mes, por fin se ha estabilizado, la caída ha sido extraordinaria, pero se ha detenido. La bajada de precios ha sido en torno al 50% desde el punto más alto, llegados a este punto, en el mes de mayo y junio, tanto Amat como los diferentes Promotores, hemos empezado a vender.
• Es positivo el consenso que se está consiguiendo en relación con la necesidad de un modelo diferente para Cataluña.
• Es positivo que Barcelona siga siendo una ciudad atractiva para vivir, y en consecuencia sigan viniendo tantos extranjeros.
• Es positivo el reconocimiento al sociólogo Manuel Castells, que ha obtenido el premio «Holberg«, el «Nobel» de los sociólogos.
• Es positivo poder escuchar a personas tan clarividentes a pesar de la edad como Jordi Pujol.

Y ahora que vienen las vacaciones, tenemos que estar positivos, porque vivimos en un país precioso, tenemos un solo maravilloso, y conseguimos que nos visiten un montón de turistas que nos ayudan a mejorar nuestra economía.

¡Buenas Vacaciones!