Fincas viejas
¿Tienes fincas viejas en tu poder, pero necesitan reformas antes de que alguien entre a vivir? ¿Qué es lo más recomendable: venderlas, arreglarlas o dejarlas tal cual?
En Amat Immobiliaris tenemos una larga experiencia en poner al día patrimonios envejecidos. Si las fincas gozan de una buena o excelente situación, es motivo suficiente para conservarlas y no venderlas, sea cual sea su estado.
Aunque no se puede realizar una diagnosis concreta e individualizada sin conocer con profundidad el patrimonio, sí tenemos un criterio claro y es el de conservar las mejores fincas del patrimonio, prescindiendo de las que estén en peor estado o peor ubicadas.
Con la venta de estas fincas se puede capitalizar y reinvertir íntegramente los intereses sobre el resto del patrimonio, con actuaciones planificadas de 4 a 5 años. Como administradores de patrimonios, es nuestra responsabilidad facilitar todos los planes de viabilidad económica y técnica, pactos con inquilinos y todo lo que significa una actuación sobre los mismos.
Aunque es una tarea a medio plazo, el resultado es sorprendente, tanto por el propietario que consigue un patrimonio saneado, moderno y rentable, como por los inquilinos que, si las cosas se hacen correctamente, colaboran con ganas, aunque les signifique un esfuerzo tanto económico como de molestias, porque ganas después en habitabilidad y confort.