Ciudades bajo tierra: la solución a la superpoblación
Según estudios de Naciones Unidas para 2050 el 66% de la población residirá en regiones urbanas propiciado por dos aspectos: la persistente preferencia de la gente de mudarse de áreas rurales a otras urbanas y el crecimiento de la población durante los próximos 35 años. Estos dos factores, entre otros, se están empezando a tomar muy en serio a nivel urbanístico para poder gestionar el crecimiento exponencial de las ciudades que pasa por ampliar sus recursos de alojamiento en ciudades bajo tierra.
Casi el 90% del crecimiento urbanístico se producirá en Asia y África y es allí donde están surgiendo las primeras iniciativas para solventar la problemática, y se está empezando a mirar «hacia abajo», hacia la creación de ciudades bajo tierra. Hasta ahora las soluciones pasaban por rascacielos pero, ¿y por qué no el subsuelo?
Expertos arquitectos plantean esta cuestión de la construcción de grandes edificios que crezcan hacia abajo para aquellas ciudades superpobladas, que por su localización no pueden crecer más.
Actualmente ya existen algunos ejemplos de ciudades bajo tierra.
México
En México ya se está diseñando un llamado «Rascasuelos» que se extenderá bajo Ciudad de México y contará con nada más y nada menos que 65 niveles con viviendas, comercios y oficinas. Aunque de momento se encuentra en fase de estudio, el estudio de arquitectura BNKR ha sido el responsable de su diseño, en forma de pirámide invertida, para asegurar luz solar en toda su extensión de 300 metros bajo tierra.
Se estima que miles de personas podrían vivir en el rascasuelos, debajo de los 57 mil metros cuadrados (240 x 240 metros) del Zócalo, la plaza principal de la ciudad de México.
The Earthscraper by BNKR
Singapur
En una superficie de 710 km2 con más de 5 millones de habitantes, no se puede crecer más. Aunque aún no se han construido viviendas bajo tierra ya cuenta con grandes espacios de almacenaje a varios metros de profundidad que pueden servir de ejemplo.
Por ahora, se está diseñado la Ciudad de la Ciencia Subterránea, que contempla unos 300.000 m2 de instalaciones científicas y que pretende albergar a unos 4.200 trabajadores a una profundidad de entre 30 y 80 metros de profundidad.
Beijing
Actualmente en Beijing ya vive gente bajo tierra. Se estima que cerca de 1 millón de personas hacen vida en el subsuelo de la capital china donde se esconde una red de refugios antiaéreos reconvertidos en vivienda debido a la demanda y los altos precios del mercado.
La fuga del medio rural a las grandes urbes ha propiciado este nuevo sistema de viviendas que, en la mayoría de los casos, no cumplen las medidas suficientes para asegurar unas condiciones mínimas de habitabilidad.
Helsinki
Debajo de la ciudad de Helsinki se esconde otro mundo. Y es que en la capital finlandesa se está mejor bajo tierra que en la superfície soportando sus -20 grados en invierno. Eija Kivilaakso, urbanista que colaboró en el diseño de espacios subterráneos, afirma que «hay tanto túneles bajo tierra que puede resultar difícil construir más.
El subsuelo de granito de Helsinki ha permitido construir bajo tierra casi 10 millones de metros cúbicos de espacios como centros comerciales, pistas de atletismo y piscinas. Los primeros 30 metros bajo la superficies están llenos, para poder construir más deberían excavar mucho más profundo.